jueves, 13 de junio de 2013

Sor Empacho presidente

El apocalipsis, la destrucción y las ruinas han sido un escenario ideal para nuevas sectas religiosas que, provistas del siempre efectivo discurso de la fe, sobre todo ante los sobrevivientes ávidos de alguna esperanza, han decidido lanzar a sus propio santoral viviente para que dirija los destinos de estas arrasadas tierras. Aunque otros maltrechos candidatos surgen por el camino, ellos sólo juegan el rol de completar la partida y legitimar lo que el poder de la fe ha decidido desde el momento mismo en el que el mundo se acabó: que sea un santo(a) el próximo presidente. Es así como surge una nueva alternativa, una monja repleta de energía –que transmite muy bien a los más jóvenes, en especial estudiantes- y que a través de grandes vallas ha abanderado una campaña política que la posiciona dentro del santoral post-apocalíptico, su nombre es sor Empacho y su principal promesa de campaña es que todo volverá a ser como antes.

miércoles, 12 de junio de 2013

De lo que me acuerdo...


Últimamente me sorprendo por recordar un montón de escenas del pasado que me resultan tan interesantes como intrascendentes, en principio. Creo que la cabeza tiene una capacidad limitada y me preocupa que las ideas nuevas, que probablemente cada vez son más difíciles de fijar, hagan desaparecer estos viejos recuerdos. Con cierta nostalgia temo que esos fragmentos de la infancia se pierdan para siempre en el tiempo, aunque de pronto esto sólo sea un capricho innecesario.

Como no soy Funes, el memorioso del cuento de Borges, probablemente estas imágenes estén viciadas por mi imaginación y al continuar subiendo hacia la tercera década se irán borrando paulatinamente, no sin antes dejarlas acá escritas. Creería que nada de esto es posterior al año 92 ni anterior al 88.