lunes, 24 de mayo de 2010

El 30 de mayo boto a JuanManu: mi parcero


Hace un par de noches cuando veía el canal RCN, decidí que en las próximas elecciones votaré por Juan Manuel 'Aguilar' para que sea gobernador o ¿presidente?...da igual, luego de ver el video en el que promete darme más trabajo mejor pagado y que por extrañas razones no puedo parar de repetir.

He tomado esta decisión no sólo por el recuerdo que esta cuña me trae de la última rumba tecno que me pegué en Melgar en las vacaciones del año 99, en la que además nos dimos un par de vueltas en el R4 de mi primo Wilson, que tiene muy bien engallado. He decidido darle mi voto a JuanManu porque también pude ver una propaganda de su campaña en tv, en la que dice con total convencimiento que es la campaña que más presencia tiene en Internet, a pesar de que varias páginas web y medios internacionales desde hace algunas semanas afirman lo mismo de Mockus, pero seguramente lo dicen porque son chaviztas, comunistas, terroristas y guerrilleros.

Pero para no parecer tan manipulable por "la caja boba", les diré que la cercanía que siento con JuanManu es total, desde el día en el que cuando viajaba por carretera me di cuenta de que él habla como yo; dice frases como por ejemplo: "de una, parcero", "pa' las que sea mijo" "le doy en la cara marica" y ese tipo de cosas que me hacen saber que él es un tipo de pueblo, que juega golf como todos los colombianos comunes, que viene de una familia que antes de la popularidad del candidato, amaba salir a hacer paseos de olla y jugar tejo todos los domingos.

Además del lenguaje cercano y coloquial que usa JuanManu, su forma de vestir es natural y muy colombiana, el sombrero aguadeño y el poncho le lucen bastante bien y, sin temor a equivocarme, podría decir que le combinan con la transparencia que develan sus ojos...claro si se los pudiéramos ver. Es que ese traje se ajusta a la perfección al carisma que lo acompaña, esa cercanía y sentimiento de confianza que irradia son únicos y bien podría asemejarse a la soltura y desparpajo de Jorge Barón en su noticiero.

Bien lo puede confirmar Armando Benedetti (quien, por cierto, también me recuerda las andanzas tecno-gomelas en Melgar), senador que como yo, la gente bien, apoyamos a nuestro cercano amigo JuanManu. Benedetti, con su inteligencia inversa a la capacidad de repartir mercados en época electoral , nos ha ayudado a abrir los ojos (a nosotros no a JuanManu) nos confirma por qué, así como él y todos los senadores de su partido, debemos botar a JuanManu.

Para finalizar, como lo reconocen J.J y J.O. quienes desde hace algunos días demuestran sus capacidades en tan cristalina campaña, J.M. es un líder natural, un verdadero adalid o de lo contrario que alguien me diga ¿quién si no una persona con cojones y con verdadero liderazgo esgrime como argumento principal que es igualito a su jefe? Sólo personas con capacidades únicas y fuera de serie, como Uribito y Juan Manu, pueden izar como su gran bandera de campaña que son igualitos a Uribe.

lunes, 10 de mayo de 2010

La "Ola verde" me está ahogando


Tal y como en el extinto Festival de la trova en Sábados Felices y después de desechar temas como el salario mínimo, la minifalda y la suegra, el sorteo para definir el tema de esta nueva entrada (evento que, con la elegancia que nos caracteriza, contó con la supervisión de la doctora Rosalba Melgarejo, delegada de alcaldías locales) determinó que debería referirme en esta ocasión a la "Ola verde".

Para empezar tengo que admitir que cada día me siento más ahogado por esta "marea", a pesar de que desde temprana edad me batí, en todas las piscinas de Apulo, en fuertes competencias de nado estilo perrito con mi tío Rafa. Aunque pensé que este entrenamiento sería suficiente para enfrentar cualquier adversidad acuática y así sobrepasar el oleaje, lo que está sucediendo sería mucho incluso para Michael Phelps.

Es imposible soportar esta creciente ola porque me rehúso a decirle "profe" a alguien distinto al señor de 50 años que juega fútbol en el parque del barrio todos los domingos con la camiseta de la empresa. Esta Ola se refiere a Mockus con el meloso apelativo de "profe", de la misma forma en que las gorditas del club de fans le dicen Ricky al señor Ricky Martin, como si fuera su amiguito de infancia.

No seré de la "Ola verde" porque no quiero lucir como una abuelita que empieza a descubrir las bondades del correo electrónico y se dedica a enviar presentaciones en Power point sobre la amistad, el amor o las maravillas de la naturaleza a sus nietos, pues no tiene interlocutores de su edad. Espero no enviar ni un solo mail en el que se hable del porqué Santos no es una buena opción, pues eso sería subestimar a mis corresponsales ¿No es acaso hiper-evidente esto cada vez que el candidato enmascarado abre la boca y entrecierra los ojos?

Espero no parecer uno de aquellos universitarios verdes que provistos de un espíritu activista y digihippie, se dedican ahora a "hacer país" a través de Flashmobs y marchas por causas justas, a pesar de que duraron ocho años pensando que los falsos positivos, las chuzadas, la Yidispolítica, la parapolítica, las zonas francas y la gestión presidencial de consejo comunal, entre otras cositas, eran parte del progreso de la democráticamente segura nación de Colombia es pasión, por lo cual no había que decir nada sino simplemente estirar el pulgar a los soldados en carretera.

No quiero ser testigo de los conteos regresivos en la página de Mockus en Facebook cada vez que se acerca su número de seguidores a una cifra terminada en cero y espero no integrar una ola en la que de un día para otro todo el mundo está más informado de las noticias políticas que el mismísimo Juan Gossain, mientras que personajes querendones y políticamente correctos, al estilo de Xiomi y buscando seguir las recomendaciones del "profe", publican por enésima vez el enlace a la  canción de la olvidada Farina; un cachaco, sabrosón y verde tropipop, o el poético y desafinado e inaguantable "
me muero de las ganas que me gobierne Antanas" .

Termino entonces esta entrada, no sin antes ponerme el sexy gorrito piscinero y un ganchito en la nariz, antes de que llegue esta incontenible "Ola verde" y me arrolle luego de leer el título y los dos primeros párrafos de esta entrada, porque seguramente no llegarán hasta esta parte, en la que confirmo mi voto no por ningún "profe", sino por Antanas Mockus, a pesar de su barba de duende, pero sobre todo a pesar de la fastidiosa "Ola verde".